Me cuentan, y no puedo dejar de repetirlo, ese de dos amigos vascos que van por el monte hablando de posibles negocios, y uno le dice al otro (acento vasco):
- Oye Patxi, y que tal si montamos un puticlub?
- Si ya...¿y si no funciona,... que hacemos ?
- Pues... lo abrimos al público