jueves, 18 de octubre de 2012

Jovenes conservadores

Tienen razón los huelguistas de la enseñanza -sean alumnos, padres o docentes- en que la educación es la base de la futura prosperidad de un país, y de que es además la mejor forma de garantizar -en el largo plazo- una sociedad más igulitaria y con mayor mobilidad social; pero eso nadie se lo niega, y en realidad no es por ello que se manifiestan. Protestan... porque ven peligrar un sistema ineficiente y elefantiásico que se ha demostrado tan caro e inutil para la socidad en general como cómodo y generoso para enseñantes y malos alumnos en particular. Los cambios propuestos por las autoridades, simplemente intentan embridar unos gastos descomunales - mayores que los de todos nuestros vecinos- que no han conseguido sino llevarnos a ser el último de la clase en el Informe PISA sobre calidad de enseñanza, detrás de todos los países de nuestro tamaño y entorno. Se intenta establecer un sistema que premie el esfuerzo y se niegue a dar títulos gratis total al estudiante que no aparece por el aula. Se busca evitar ser el país con mayor nivel de fracaso escolar de Europa. Los cojos manteca de turno no están pidiendo una mejora de la enseñanza, sino...¡increible!..que nada se toque. Hace unos días decía Feijoo, con mucho tino, que Galicia no tenía un problema con el castellano y el gallego, sino con el inglés...pues bien...toda España tiene ese mismo problema -aunque Esperanza Aguirre haya dado pasos para solucionarlo en Madrid- extensible además a otras muchas materias lectivas, que o bien no se imparten o se imparten mal. Los jovenes no deberían protestar porque alguien intente cambiar las cosas...sino para exigir que se cambiasen.