martes, 8 de mayo de 2012

Hollande

La nueva esperanza tricolor; el adiós a los tiempos díficiles; un nuevo amanecer. Esta es la  forma de pensar en Francia tras el cambio presidencial. Sarkozy lo había hecho mal...o muy mal; estrellandose inicialmente, y luego consensuando, con una Francia anquilosada. Aún con eso, los franceses siguen pensando que pueden vivir de la nada, que el mero hecho de ser franceses les hace ricos para toda su vida. El país está en un declive claro - desde hace decadas - y el salvador aumento en el  gasto púiblicoes totalmente inviable, ya que los mercados no lo permitirán. Hollande se puede poner como quiera, pero al final poca cosa podrá hacer...que no sea acometer las reformas que los presidentes - uno tras otro - posponen sine die.