jueves, 31 de mayo de 2012

Monogamia (y 2)

...como deciamos son muchos que opinan que la teoría de Gavrilets hace agua por los cuatro costados. Fundamentalmente porque el hombre - y la mujer - estan geneticamente programados para ponerse los cuernos a la menor oportunidad. Los defensores de estas posiciones nos recuerdan que la monogamia es postiza y que la poligamia - y la poliandria en menor medida - han sido y siguen siendo comunes en nuestro querido planeta tierra. El hombre no es de marmol en lo tocante a la carne http://www.oup.com/us/catalog/general/subject/Psychology/Sexuality/?view=usa&ci=9780199777921 y la mujer - especialmente en los días fértiles - hace lo que puede en este departamento, que es mucho http://www.womensinfidelity.com/.
Mi posición es intermedia: Geneticamente no dejamos de ser papiones evolucionados, y en consecuencia,  tendemos a la infidelidad; si no, sería inexplicable la universal pandemia de idem;  pero culturalmente, nos criamos en el ideal de la monogamia; incluso, desde comienzos del siglo XX, de la monogamia romántica. Son las sociedades occidentales - fundamentalmente herederas del cristianismo y judaismo - las defensoras de estas posiciones, que por otro lado se han demostrado coadyuvantes al progreso social y económico; frente a otras culturas y religiones - islamismo, hinduísmo - más laxas en esta sección.